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El arnés de seguridad es el equipo de protección mediante el que todo operario está fijado mediante un conector y conjunto de elementos que integren el sistema de anclaje, permitiendo el trabajo con plenas garantías. Todos los arneses de protección están regulados por la norma EN 361.
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Los arneses son imprescindibles para garantizar un correcto sistema de prevención contra caídas durante los trabajo que representen riesgo en altura.
La normativa europea los distingue en función de las siguientes características:
- UNE-EN 361:2002: Arneses anticaída que protejan contra caídas de altura cuando el riesgo de caída es real.
- UNE-EN 358:2000: Cinturones para sujeción y retención y sus componentes de amarre de sujeción como protección individual para sujeción en posición de trabajo y prevención de caídas en altura (siendo el riesgo de caída nulo o inexistente).
- UNE-EN 813:2009: Arneses de asiento para prevención de caídas de altura. Es preciso señalar que no son adecuados para detener una caída.
- UNE-EN 1497:2008: Arneses de salvamento.
Descripción y características de los arneses anticaídas
Los arneses anticaídas están formados por bandas de poliéster o nylon y sus herrajes correspondientes para que soporten una caída caída (EN 361) o nos posicionen y sujeten durante los trabajos de riesgo en altura (EN 368). También son utilizados como elemento de izado o descenso en el lugar de trabajo y o salvamento (EN1497). Una consideración en el momento de elegir un sistema anticaída:
- Que nos ajuste confortablemente al cuerpo y de esta forma asegurar una óptima adaptación a nuestra morfología corporal. Pueden estar disponibles en diversas tallas (XSM, STD, XLG y SXL), aunque el modelo estándar STD (adecuado hasta 1,90 m de altura y 100 kg de peso) se regula y adapta a la mayoría de las personas. El diseño, la amplitud de las bandas y el acolchado en hombros, cinturón y perneras incrementa esta importante característica.
- Recomendamos un arnés que permita una fácil colocación y ajuste. Que permita además, realizar movimientos y desplazamientos sin restricción ni molestia durante toda la actividad laboral.
En el mercado se presentan dos estilos de arnés:
- Tipo paracaídas, caracterizado por la colocación semejante al de un chaleco.
- Con los tirantes cruzados sobre el pecho, siendo la colocación por la cabeza a modo de pullover.
La selección, generalmente es una cuestión de preferencia personal del usuario. Destacar también los variados tipos de herrajes que incorpora el arnés:
Hebillas, los puntos de enganche dorsal y frontal, identificados con ‘A’, ambos para ser utilizados como anticaídas y también para salvamento. En cadera o laterales, usados solamente para sujeción o posicionamiento en el trabajo. Los enganches en hombros, por lo general son lazos cosidos de la propia banda, que se usan en maniobras de izado o descenso al lugar de trabajo o para auto-salvamento y rescate.
Hebillas, los puntos de enganche dorsal y frontal, identificados con ‘A’, ambos para ser utilizados como anticaídas y también para salvamento. En cadera o laterales, usados solamente para sujeción o posicionamiento en el trabajo. Los enganches en hombros, por lo general son lazos cosidos de la propia banda, que se usan en maniobras de izado o descenso al lugar de trabajo o para auto-salvamento y rescate.
Uso y mantenimiento de los arneses anticaídas
El Manual de Instrucciones del producto debe disponer de información detallada para el uso, mantenimiento y almacenamiento, en la lengua oficial del país en que se efectúa el suministro al usuario final.
- El arnés debe ser inspeccionado antes de cada uso para verificar que está en condiciones de servicio. Adicionalmente, al menos cada 6 meses debe inspeccionarlo persona cualificada, realizando un examen del buen estado de todos sus componentes y retirarlo del uso en caso de detectar condiciones inseguras. En la etiqueta del producto debe marcarse la caducidad y registrarse.
- Para la colocación del arnés debe seguirse los pasos que se describen en la figura 6, verificando que las bandas no están viradas y el ajuste al cuerpo es firme sin apriete excesivo (comprobar antes y durante el uso el cierre de hebillas).
- No usar componentes acoplados al arnés que no sean compatibles, responsabilidad que recae sobre la persona autorizada a preparar el sistema anticaídas y determinar el protocolo en la intervención. Es indispensable que toda intervención en altura o con riesgo de caída, disponga de un plan de rescate con medios y personal adiestrado para implementarlo, para evitar el doloroso trauma de suspensión y sus peligrosas consecuencias.
- Al preparar la intervención en altura es importante conocer el entorno del lugar donde se realiza, principalmente la ausencia de obstáculos en el posible trayecto de caída y que la distancia al suelo sea suficiente, garantizando un margen de seguridad de acuerdo con las prestaciones de los componentes que forman el sistema anticaída utilizado (ver la figura 7).
- La vida útil del arnés es como máximo, de 5 años, en condiciones normales de uso y el adecuado mantenimiento. Esta vida puede acortarse drásticamente si se almacena/utiliza incorrectamente o en entornos agresivos (sustancias químicas, calor, corrosión), en caso de caída y también por desgaste mecánico.
- Las bandas del arnés son de fibras sintéticas multifilamento, por ejemplo poliéster o nylon, y los herrajes de acero cincado o aleación de aluminio Para la limpieza de las bandas y herrajes, usar agua con detergente suave, secar con un paño y colgar al aire. En ningún caso acelerar el proceso con calor. La acumulación de suciedad, pintura u otros productos foráneos pueden afectar el funcionamiento de los cierres y debilitar la resistencia de las bandas.
- Almacenar el equipo en lugar limpio y seco, resguardado de la luz solar. Evitar áreas con presencia de calor, suciedad, aceite y vapores químicos que puedan afectar o degradar a los componentes, Separar los equipos en buen uso de los dañados que precisan reparación. Transportar los equipos con embalaje que proteja de cortes, suciedad y entornos corrosivos o degradantes.